Las sociedades administradoras de fondos de inversión (SAFIs) operan en un entorno de negocios cada vez más volátil, enfrentando situaciones en el Perú como los rezagos de la pandemia, reducción de la actividad económica y aumento de la pobreza, crisis políticas y sociales, recesión mundial, cambios climáticos, además de los riesgos convencionales (riesgos financieros, operacionales y de cambio regulatorio). En este sentido, las empresas requieren contar con estructuras sólidas y procesos eficaces para alcanzar sus objetivos, gestionando de manera adecuada los riesgos para garantizar la continuidad de los negocios y la sostenibilidad.
Los fondos de inversión ofrecen a los partícipes la oportunidad de rentabilizar sus recursos al invertirlos en diferentes instrumentos financieros o activos. Sin embargo, considerando que ninguna inversión está libre de incertidumbre, resulta muy importante conocer los riesgos¹ asociados a los fondos de inversión para elegir la mejor alternativa según las necesidades y objetivos del inversionista.
Es fundamental gestionar los riesgos de los fondos de inversión para buscar proteger el capital y maximizar los rendimientos. Una estrategia eficaz de mitigación de riesgo comienza con una evaluación exhaustiva de los riesgos específicos del fondo, que consiste en la investigación e identificación de los factores que afectan al fondo para luego darle un tratamiento y monitoreo respectivo. En este punto se analizan aspectos como la volatilidad, la liquidez, la solidez y seguridad de los activos de inversión, así como la concentración de la cartera. Esta evaluación de riesgos permite tomar decisiones más informadas y conscientes al seleccionar los activos de inversión que se ajusten a las necesidades y tolerancia al riesgo de los inversionistas.
La diversificación es otra estrategia para reducir el riesgo ya que implica distribuir la inversión en una variedad de activos, sectores económicos y geografías. De modo que si cae el valor de la inversión de un activo puede compensarse con el rendimiento estable o positivo de otra. Además, una ventaja de contar con un fondo con una cartera diversificada es que permite a los partícipes, realizar un mix de inversiones en ciertos mercados que de manera individual o particular no podrían lograrlo o sería muy costoso hacerlo y no necesariamente bien gestionado.
También resulta importante realizar el monitoreo y seguimiento continuo a la cartera o instrumentos de inversión ya que se pueden dar cambios en las condiciones del mercado y en la economía que pueden afectar a los fondos. Por lo tanto, a fin de mitigar los riesgos, se debe revisar regularmente las inversiones del fondo y realizar los ajustes que sean necesarios.
Por otra parte, las inversiones de los fondos pueden estar respaldadas adicionalmente por garantías en algunos casos, por lo tanto, esto constituye un mejorador o factor de protección al riesgo.
Asimismo, la gestión profesional de los fondos es una estrategia de mitigación de riesgos, vale decir, si se cuenta con el personal idóneo, con buen historial y experiencia en inversiones se tomarán decisiones adecuadas para la selección de activos de la cartera. Además de evaluar la capacidad profesional del personal que administra los fondos, se debe analizar aspectos cualitativos como el character de la sociedad administradora de fondos de inversión, que abarca la revisión del historial de conducta y ética, estructura organizacional y procedimientos, así como el análisis de las políticas de marketing y ventas de los fondos de inversión (no sobreventa de productos), la transparencia de la información y comunicación oportuna a los inversionistas; todo esto minimiza la exposición al riesgo y genera mayor confianza en el mercado.
Por otro lado, debe tomarse en cuenta que una empresa regulada por la Superintendencia del Mercado de Valores (SMV), brinda mayor transparencia y confianza a los inversionistas que otros agentes no regulados, ya que éstas últimas son más flexibles en sus procesos y generalmente no cuentan con principios de buen gobierno corporativo. Por el contrario, las empresas reguladas cuentan con: a) procedimientos de debida diligencia y varios manuales, b) diversos comités, c) oficial de cumplimiento, d) requieren de un capital mínimo para operar, e) se cuenta con informes de auditoría externa de estados financieros, f) reportes que se presentan regularmente a la SMV. Al contar con información pública, así como evaluaciones independientes de auditores externos se fomenta un entorno más seguro y confiable para los inversionistas.
Finalmente, la inversión siempre conlleva algún riesgo inherente pero si se cuenta con una gestión adecuada, puede minimizarse y lograr un equilibrio entre el riesgo y rendimiento de los fondos, pero también es importante que la elección del fondo se adecúe al perfil de riesgo del inversionista.
¹Según el Estudio de Gestión de Riesgos en Latinoamérica 2024 (realizado por Pirani), la ciberseguridad y protección de datos sigue siendo el riesgo más importante a gestionar para la mayoría de empresas de la región. En segundo lugar, se ubica el riesgo de fraude, corrupción y otros delitos financieros, seguido por el riesgo de cambio regulatorio y cumplimiento normativo (tercer lugar), riesgo de continuidad del negocio (cuarto lugar) y riesgos financieros (décimo lugar).
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